Esta realidad es particularmente dramática en la atención primaria, como puede advertir cualquier usuario y como denuncian por activa y por pasiva los profesionales sanitarios. El sindicato Metges de Catalunya denunciaba recientemente el poco tiempo asistencial, la sobrecarga laboral y las bajas retribuciones de los médicos de familia que se traduce en que quedaran vacantes el 60% de las plazas de MIR en Cataluña.
Por otro lado, los equipamientos sanitarios en municipios con gran densidad de población como l’Hospitalet son insuficientes y llevamos años esperando equipamientos prometidos como los CAP de Florida sur o San José. Por si fuera poco, la política urbanística del Ayuntamiento no hace más que agravar la situación. L’Hospitalet es el municipio con mayor densidad de población de Europa y el Ayuntamiento no hace más que fomentar la construcción de miles de pisos sin preocuparse ni en planificar las nuevas necesidades de equipamientos sociales que genera semejante crecimiento en un municipio ya de por sí con los equipamientos muy tensionados.
El problema, pues, no es solo con la sanidad, ya el año pasado el propio Ayuntamiento denunciaba que el 40% de las aulas de la ciudad superaban la ratio de alumnos o l’Hospitalet está por debajo de la mitad de la media de plazas residenciales para personas mayores. Mientras tanto, la reserva de suelo disponible en la ciudad se va consumiendo con nuevas promociones inmobiliarias y el gobierno local prefiere destinar el escaso suelo municipal a grandes corporaciones que le brinden titulares a la alcaldesa antes que a los equipamientos que necesitan los ciudadanos.
Desgraciadamente, ni el gobierno autonómico ni el gobierno municipal priorizan las políticas sociales que necesitan los ciudadanos de l’Hospitalet, como es el caso de la sanidad.
Si (
No(
